¿Sueña con unas vacaciones paradisíacas en Indonesia, pero teme los elevados precios? Buenas noticias: viajar al popular balneario puede ser bastante asequible si se conocen los planteamientos adecuados para planificarlo. En este artículo te desvelamos los secretos de un viaje económico a Bali. Aprenderá a encontrar opciones de alojamiento, restauración y ocio a buen precio para disfrutar de la isla sin que su cartera se resienta.
Del dicho al hecho: formas reales de ahorrar dinero en Bali
La teoría está bien, pero ¿cómo son en la práctica unas vacaciones económicas en Bali? Se trata de decisiones cotidianas y pequeños trucos sobre alojamiento, transporte, comida y ocio. Veamos formas concretas, probadas por muchos viajeros, que permiten disfrutar de la isla sin pagar de más.
Secretos del viaje económico en Bali
Estos métodos han sido probados por miles de viajeros que prefieren la libertad a la agencia de viajes. No exigen sacrificios, sólo un poco de flexibilidad y atención. Las formas prácticas de ahorrar dinero funcionan aquí: donde los pequeños hábitos suman grandes ahorros. Cada elemento es una herramienta concreta que reduce costes sin comprometer la experiencia:
- Reserve alojamiento a través de chats locales: ahorro de hasta el 30%.
- Utiliza una moto en lugar de un taxi – menos 5-10 $ al día.
- Compra fruta en los mercados y no en los supermercados: la diferencia es de 2 a 3 veces mayor.
- Las comidas en los warungs cuestan entre 2 y 3 dólares al día, en lugar de 15.
- Ir a playas y festivales gratis cuesta 0 $ frente a 20 $ por excursión.
- Combine itinerarios turísticos, ahorrando hasta 40 $ por viaje.
- Utiliza las aplicaciones GoJek y Grab: precios fijos y justos.
Los secretos de un viaje económico en Bali residen en la racionalidad, la flexibilidad y la capacidad de encontrar el placer en la variedad más que en el coste.
Alojamiento – 70 $ por semana
Se puede encontrar alojamiento barato en Bali en todas las zonas turísticas. Una pensión con wi-fi, ventilador y baño privado cuesta unas 150-180 mil rupias al día (10-12 dólares). Cuando se alquila por una semana, los anfitriones suelen hacer descuentos de hasta el 20%. Así, el precio por 7 días oscila entre 1 y 1,2 millones de rupias, lo que equivale a entre 65 y 70 dólares. Optar por gesthouses o habitaciones en casas locales reduce los costes y permite sumergirse en la cultura. Muchas opciones ofrecen desayuno gratuito, otra forma de ahorrar dinero.
Transporte – 20 $ por bicicleta
El transporte barato en Bali no es una alternativa, sino la norma. Alquilar una moto durante una semana cuesta 600-800.000 rupias (38-52 dólares). Si se paga directamente al propietario, el precio baja a 20-25 $. En Changgu y Ubud, la moto sigue siendo el transporte más económico y cómodo. Un depósito lleno (2,5 litros) cuesta 25.000 rupias (1,6 dólares) y basta para 3 ó 4 días. Los secretos del viaje económico en Bali desaconsejan alquilar un coche: los atascos, el coste y el aparcamiento lo hacen poco rentable.
Comida – 40 $ a la semana
La comida barata en Bali no sólo proporciona ahorro, sino también variedad gastronómica. Una comida en un warung cuesta 15-25 mil rupias (1-1,7 $). Con tres comidas al día en estos cafés, el coste es de 45-75 mil rupias diarias (3-5 dólares). Para siete días, son unos 35 dólares. Añadiendo frutas y aperitivos ligeros del mercado (por ejemplo, plátanos – 7 mil rupias/kg, mangos – 12 mil rupias), el importe total no superará los 40 dólares. Los secretos del viaje económico en Bali aconsejan alternar los warungs con el supermercado y la comida callejera. De este modo se conserva la variedad y se reduce el coste de la comida.
Entretenimiento – 15 $ a la semana
El ocio gratuito en Bali hace que las vacaciones sean asequibles sin comprometer la experiencia. La mayoría de las playas están abiertas las 24 horas del día y no hay que pagar nada.
Los paseos por las terrazas, el yoga al amanecer, los mercados y las cascadas suelen ser gratuitos o por un donativo. La entrada a la cascada de Kantolempang cuesta 10.000 rupias (0,7 dólares), y en Uluwatu, donde sólo se puede aparcar al atardecer, se cobra 3.000 rupias. Para una semana de entretenimiento con excursiones, lugares naturales y actos culturales rara vez se superan los 15 dólares. La práctica de unas vacaciones asequibles sugiere consultar con antelación los horarios de festivales y eventos gratuitos de la zona.
Excursiones – 30 $ para 2-3 salidas con equipaje
Las vacaciones low cost también incluyen excursiones organizadas; lo principal es no cogerlas de vendedores ambulantes. Reservar en línea a través de agregadores locales reduce el precio hasta 10-15 dólares por excursión. Los itinerarios autoguiados suponen un ahorro aún mayor. Subir al Batur con un guía cuesta 25 dólares. Por tu cuenta, sólo cuesta 5 $ la entrada y 2-3 $ los traslados. Una excursión combinada con el templo de Tirta Empul, la cascada de Tegenungan y las terrazas de Ubud cuesta 10 $ si se alquila una bicicleta. Los secretos del viaje económico aconsejan planificar los itinerarios con antelación y combinar los lugares por distritos. Así se reducen los gastos de viaje y se disfruta de un día más completo.
Máximo al mínimo
Puedes gastarte 175 dólares por una semana en todo: alojamiento, comida, transporte, excursiones, playas, entretenimiento. Al mismo tiempo, las vacaciones no pierde su intensidad, la belleza y el nivel de confort. El precio medio de un paquete turístico de una semana a través de agencias – a partir de 1100 $ sin excursiones, con restricciones en las rutas y la comida. Los secretos del viaje económico a Bali revelan un enfoque alternativo: flexible, independiente y económico.
Este enfoque permite ahorrar dinero, conocer la isla, entender su ritmo y disfrutar de las vacaciones a su aire.
Secretos para viajar con poco dinero a Bali.
Las vacaciones no dependen de la cantidad de dinero que se tenga en la cartera. Una asignación presupuestaria adecuada reduce el gasto en alojamiento, comida, transporte y actividades de ocio. La intensidad del viaje sigue siendo la misma. Lo importante no es la cantidad de dinero que se gasta, sino la forma de organizar y controlar los gastos. Un planteamiento racional convierte cada gasto en una inversión de comodidad, libertad y experiencia. Unos pasos bien pensados le permiten descubrir el complejo en su totalidad, sin compromisos ni presiones financieras.